08 octubre, 2009

Cierra ese post ahorita mismo ¡he dicho!

Todo empezó hace 1 mes aproximadamente, Javier Arévalo, asistió a uno de los 3 colegios donde trabajo. La verdad es que estaba muy contento porque era la primera vez que un escritor conocido iba a esta institución. Para lograr su visita el nivel Secundaria del colegio trabajó con quizá, uno de los mejores planes lectores del Perú, que, modestia aparte, tuve que convencer en vacaciones, diciéndoles que los alumnos del colegio donde trabajo tienen una fuerte base como lectores, etc. (este último dato no es exageración).
Ellos me oyeron, y al final me aceptaron. Hago del conocimiento general que el Proyecto Recreo, selecciona a los colegios con los que va a trabajar y no por el contrario el colegio selecciona al Proyecto Recreo. Informo además que parte del Proyecto Recreo incluye conferencias con los mismos escritores, un ameno espacio en donde los alumnos pueden dialogar con los autores de los mismos libros que han leído durante 1 mes. Realmente algo muy bueno e innovador.
Aproximadamente unos cuarenta o cincuenta alumnos de cuarto y quinto de Secundaria, oyeron la conferencia de Javier, todos estaban un poco sorprendidos por los comentarios nada floreros de este conferencista. Fue directo y duro, como hay que ser a veces, pero la reunión en pocas palabras fue muy entretenida.
Dado que este escriba es el responsable del curso de Plan lector, se me ocurrió la idea, de hacerle una entrevista en vivo, frente a los alumnos, e intenté poner en aprietos a Javier con preguntas que no mellaron su visible experiencia en estas lides.
Tomé 3 fotos de la conferencia, llegué a mi casa, y quise poner en práctica la casi nula experiencia como periodista que sólo se circunscribe al haber trabajado en un diario Fujimorista de circulación nacional, y que renuncié por principios, cuando intentaron sacarme de la sección cultural y pasarme a la sección política. Pero eso es otra historia.
El titular de mi noticia fue "¿Y dónde están los directores?" luego de una breve introducción, publiqué las 3 fotos. La última reflejaba mi titular, las sillas de los directores del colegio vacías, en la parte de atrás se pueden ver a un grupo de alumnos oyendo la conferencia, y mientras veía en mi casa la foto, no pude dejar de pensar en el poco compromiso de las autoridades en general de este país. Es posible, y lo entiendo, créanme que sí, que a aquella reunión no pudieron asistir los directores por X motivos, lo curioso es que después de la conferencia nadie me dio una explicación ni se excusó ni nada. O sea, la misma peruanada del Perú, no voy, no asisto, yo soy el jefe, no pido disculpas a nadie, etc.
Pero el mundo es chico, mis alumnos sí se enteraron de este post, titulado como ya les he contado "¿Y dónde están los directores?", y empezaron primero a despotricar contra Javier, contra mí, y finalmente, luego de responderles educadamente, empezaron a criticar esta no asistencia de las autoridades a dicho evento haciendo comentarios obviamente desde el anonimato, temiendo que se tomen represalias en su contra. Hasta la fecha no he borrado ningún comentario porque me parece que los alumnos deben dar su opinión libremente acerca de los eventos de los que son partícipes.
Mis alumnos serán jóvenes e ingenuos, pero considero que tanto ellos como yo merecían unas disculpas, unas disculpas que nunca llegaron, por el contrario, hoy, 8 de octubre, aproximadamente hace 30 minutos, me acaba de llamar el Coordinador del colegio pidiéndome que borre aquella noticia, y por ende los comentarios.
Este blog, espacio virtual y de mi autoría, es un blog personal, un cuaderno de bitácora en donde mis opiniones son de mi completa responsabilidad. Lamento decir que no borraré post alguno, y menos si el pedido se me hace de esa forma que es quizá como se maneja este país, diciéndome seguramente para meterme miedo, que "los directores quieren hablar conmigo el día lunes". Pues sépanlo bien que yo también quiero hablar con los directores del colegio a quienes respeto mucho, pero creo que una crítica bien fundamentada debería tomarse de la mejor manera. Mi pregunta ahora es ¿qué clase de profesores quieren? ¿Qué clase de profesores busca un colegio? Yo no soy profesor, pero mi profesión como literato me ha hecho pensar y creer que la única forma de cambiar el nivel de educación de este país es abriéndole los ojos a nuestros alumnos, pero si no pueden aceptar una crítica como la mía, qué clase de crítica pueden aceptar.